Estimar o no estimar…

Un recurrente debate que puede estar ya resuelto para algunos pero que puede no estarlo para muchos otros. Sobre todo para los más iniciados.

Lo primero es entender que debe existir un propósito (razón, motivo) para usar o no usar algo, o para hacer o dejar de hacer.

Así que esa es la primera cuestión que debemos de resolver para poder a su vez -y valga la redundancia- resolver la cuestión principal.

Siendo fieles al principio de #SHUHARI, y entendiendo que llevar la #estimación a la mínima expresión puede ser una buena idea de cara a la #planificación del #sprint, no podemos olvidar que las empresas están acostumbradas y se sienten tremendamente cómodas cuando trabajan y ponen sobre la mesa estimaciones y previsiones de lo que hacen y esperan lograr para de ese modo gestionar su incertidumbre. Y así resolvemos la primera cuestión. Sí estimar.

Ahora, vamos a la segunda y principal. Introduzcamos la siguiente variable; si entendemos la planificar como acción contraria a la #iteración, y se entiende que si la esencia y el propósito de #Scrum es #generar y #entregar #valor a través de ciclos de vida iterativos e incrementales, la estimación no llevada a su mínima expresión es “debilitar” el propósito del marco. Esencia del marco; no planificar, iterar, no estimar…

Total, ¿estimamos o no?

Nuestra conclusión es que debemos de buscar un #equilibrio entre la comodidad del equipo (organización) y el propósito del marco y para ello, nos puede ayudar; SHU HA RI. Empieza estimando y poco a poco rompes, adaptas y transformas…